Viste uniforme de dos tonos de azul, el atuendo de la enseñanza preuniversitaria. Se acerca en solitario a la máquina rectangular, también azul, que cuelga de la pared: un dispensador de condones. Deposita 20 centavos, gira la manigueta y, sin mediación de personas, miradas o juicios, recoge su cajita de tres preservativos. Este es uno de los 12 equipos de ese tipo instalados desde diciembre pasado en La Habana, un experimento que mide la efectividad de ese sistema para su posible extensión y constituye un complemento a la distribución de la red de 83 farmacias y los más de 400 puntos no tradicionales (cafeterías y comercios) de venta de condones existentes en la capital cubana, donde habitan 2,2 millones de personas y se concentra más de 50% de la epidemia del VIH/sida.
http://www.redsemlac-cuba.net/Especial-de-VIH/sida/jovenes-y-vih-ir-mas-alla-en-la-prevencion.html
martes, 18 de octubre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario